Resumen:
Trabajo presentado en las 15º Jornadas Científicas y de Gestión del Hospital de Alta Complejidad en Red El Cruce Dr. Néstor C. Kirchner realizadas durante los días 19, 20 y 21 de Octubre del 2022 en Florencio Varela, Buenos Aires, Argentina. Introducción y Objetivos: El infarto agudo de miocardio (IAM) presenta una incidencia mayor en pacientes con cáncer. Paralelamente existen agentes quimioterápicos que pueden generar tanto isquemia como IAM entre sus efectos adversos. Métodos: Presentamos un caso clínico con diagnóstico reciente de cáncer e IAM. Resultados: Paciente masculino de 38 años, ex tabaquista, con diagnóstico reciente de coriocarcinoma testicular en estadio III que requirió orquiectomía, con indicación de 4 ciclos de quimioterapia con cisplatino, etopósido y bleomicina.
Inició 24 horas posteriores al segundo ciclo con angor de máxima intensidad por lo que consultó al servicio de urgencias.
Se realizó electrocardiograma donde se evidenció supradesnivel del segmento ST con ondas T hiperagudas en cara anterior y lateral realizandose cinecoronariografia de urgencia que evidenció oclusión a nivel de segmento proximal de arteria descendente anterior, con el resto del árbol coronario sin lesiones. Se realizó angioplastia primaria con colocacion de 3 stent liberadores de drogas. El ecocardiograma informó fracción de eyección del ventrículo izquierdo (FEVI) deI 54% y aquinesia en los 4 segmentos apicales.
Posteriormente se realizó angiotomografia cardiaca que evidenció score de calcio de 9 unidades Agatston, sin evidencia de remodelado positivo ni lesiones agregadas. Adicionalmente se objetivó trombosis intrastent no oclusiva, sin compromiso clínico.
Se discutio en ateneo multidisciplinario y dada la buena evolución de los marcadores tumorales y la alta chance de remisión del coriocarcinoma, se optó por continuar con los ciclos restantes bajo monitoreo cardiológico durante la infusión de drogas, y complementar el tratamiento medico con anticoagulacion.
La evolución posterior fue favorable. Se completaron la totalidad de los ciclos planificados bajo monitoreo cardiológico y en un nuevo ecocardiograma se apreció una FEVI de 63% y mejoría de los trastornos de motilidad apicales. Conclusiones: La isquemia miocárdica y el infarto en pacientes con neoplasias activas puede deberse a fenómenos protrombóticos propios de la enfermedad de base como también a un efecto adverso del tratamiento con drogas quimioterápicas. El tratamiento del IAM no difiere del recomendado en pacientes no oncológicos. Resulta fundamental el abordaje interdisciplinario a fin de optimizar el tratamiento específico y asi mejorar tanto el pronóstico cardiológico como el oncológico en este grupo de pacientes.