Resumen:
Introducción y objetivos:
La hemorragia subaracnoidea aneurismática (HSA) es una emergencia neurológica con una incidencia de 6-10 cada 100.000 habitantes/año. Su mortalidad ronda el 40-45 %. Las causas de muerte de estos pacientes, han sido investigadas en estudios recientes en centros de referencia.
Aunque en argentina no hay una red de derivación para estos pacientes, el Hospital El Cruce es un centro de referencia en patología neurocrítica, con un promedio de 40 casos de pacientes con HSA al año. Nosotros estudiamos la causa de la muerte y el momento evolutivo en que esta se produce.
Métodos:
Es un estudio, retrospectivo, sobre una base prospectiva, observacional y unicentrico.
Se incorporaron pacientes mayores de 18 años, con diagnóstico de HSA, ingresados de manera consecutiva con menos de 21 días post-sangrado.
Los datos fueron obtenidos de una base de datos prospectiva. Para determinar la causa de muerte, se revisaron las historias clínicas y las tomografías de los pacientes incluidos.
Las variables analizadas fueron; edad, sexo, antecedentes patológicos, gravedad del paciente evaluado por score APACHE II a las 24 horas, escala mundial de neurocirujanos y clasificación de Fisher modificada, episodios de actividad tónico-clónica y/o deterioro del sensorio en el momento del sangrado y puntaje de la escala coma Glasgow de arribo al hospital.
La causa de muerte se dividió en principios en dos grupos (Figura 1)
Para el 2º objetivo, se estableció el periodo entre día cero (día del sangrado) y día de fallecimiento.
Resultados:
Entre octubre del 2010 y marzo del 2017, fueron externados 253 enfermos con el diagnóstico de HSA. La mortalidad fue del 26 %, con una duración de la internación de 20 (12-38) días.
La causa de muerte se muestra en Tabla 1
El día post sangrado del fallecimiento es después de la primera semana 13 (7-21), sin una diferencia significativa cuando la muerte es por muerte encefálica 13 (8-17) o parada cardiaca 12 (7-35).
Conclusiones:
La mortalidad fue del 26 %. Un tercio se mueren por muerte cerebral, siendo el infarto cerebral extenso la causa más frecuente. El 63 % de los óbitos fue en condición de parada cardiaca. El shock séptico a foco pulmonar fue el diagnóstico de mayor porcentaje, seguido de shock neurogénico y shock cardiogénico por miocardiopatia.
La mayoría de los pacientes mueren luego de la primer semana post sangrado, no habiendo diferencias entre óbito por muerte encefálica o parada cardiaca