Resumen:
La hipertensión pulmonar es una enfermedad incurable con una mediana de supervivencia de 7 años, que en la etapa crónica se caracteriza por elevada morbimortalidad con múltiples hospitalizaciones que anuncian una rápida progresión de la enfermedad. Por lo antes mencionado, la capacidad del médico para diagnosticarla, evaluar la etiología, dirimir la progresión de la misma, y determinar el riesgo exacto es fundamental, para así poder determinar el cuidado óptimo de los pacientes, y su adecuada terapéutica. La predicción de riesgo integral es esencial para individualizar las decisiones terapéuticas, para ello se cuenta con varias herramientas disponibles para evaluar el riesgo, entre las que se incluyen las de la Sociedad Europea de Cardiología / Sociedad Respiratoria Europea (2015), las Guías Niza de Hipertensión Pulmonar (2013-2018), o la ecuación del registro francés, entre otras. Ninguno de los escores de predicción de riesgo han sido prospectivamente validados; sin embargo, las guías han podido extraer de ellos datos para elaborar un sistema de alertas que ayuda a estratificar el riesgo y aportar algoritmo pronóstico.